El salón de la casa se ha convertido en el ambiente más utilizado para toda la familia. Debido al tamaño reducido de las viviendas nueva de hoy en día nos encontramos con una sala polivalente: para estudiar, leer, ver la TV, descansar, conversar, etc.
Es por ello que debemos agudizar nuestro ingenio y hacer uso de recursos decorativos, como los que te presentamos a coninuación, para lograr un ambiente acogedor, amplio, despejado y luminoso, a pesar de la escasez de metros.
Planifica bien cada zona
Si estudias cuidadosamente la disposición de los muebles puedes crear múltiples zonas (y hasta independizarlas. Por ejemplo, si la planta del salón es muy alargada o estrecha sitúa una pieza transversalmente, para así evitar la sensación de “tubo”.
También puedes decantarte por sofás en tonos claros y de respaldo bajo, ya que ocupan visualmente poco espacio, no restan profundidad y te permiten separar el salón del comedor.
Utiliza bancas, butacas.
Si precisas una zona de estar amplia y no dispones de espacio para muebles grandes, entonces prueba a colocar uno o dos sofás (enfrentados) y completa con piezas más ligeras, de menor altura, que dejan pasar la luz natural y aportan sensación de espacio diáfano.
Pufs y butacas constituyen la mejor alternativa, además puedes colocarlos alrededor de la
mesa de centro para potenciar su utilidad, además ocupan poco espacio y son muy decorativos (puedes elegirlos de diferentes formas y en colores que hagan contraste).
Salones cuadrados
La mejor opción es colocar dos sofás
dispuestos en “L” y una mesa de centro cuadrada. Si cuantas con más espacio puedes incorporar una butaca de líneas simples y de estructura liviana.
Ventanas
Adosar un sofá a la ventana y pintar la pared de igual color
que este mueble, dará la sensación de estancia ligera restando volumen al sofá.
Mesas
Para la mesa de centro elige modelos de estructura sencilla, acero, cristal, madera clara; puedes elegir dos piezas pequeñas
Muebles auxiliares
Encarga a medida o escoge piezas que se adapten a rincones que no deben ser desaprovechados (columnas, bajo la ventana, etc.), siempre en el mismo acabado de la pared para que aporten sensación de continuidad, integrándose en el ambiente y pasando casi desapercibidos.
Televisión
Si vas a colocar la “tele” en el salón, la opcion que mejor te permite ahorrar espacio es colgarla como si se tratase de un cuadro.
Ambientes de estilo clásico requieren tejidos nobles y sofisticados, que destaquen por aplicaciones y estampados distinguidos. Terciopelos y sedas son ideales para componer elegantes cortinas en un imponente salón, acompañados de brocados, adamascados, geometrías en relieve y bordados (ya sea en cojines o en el tapizado de alguna butaca de estilo). Y es que se preservan con el paso del tiempo actualizándose de forma progresiva.
Estancias coloniales o rústicas con aire étnico solicitan linos, lonetas, estampados étnicos y texturas fibrosas, vivas. Tejidos de aspecto envejecido, pieles, degradés y revestimientos compuestos por fibras naturales (como los papeles japoneses) son estupendas opciones.
Los estilos contemporáneos admiten elementos más funcionales y de aspecto ‘clean’. Lo que no quiere decir que no se pueda sorprender aplicando un estampado vintage o un ‘toile de jouy’ en algún elemento clave ubicado en un ambiente minimalista. En mis proyectos procuro siempre desarrollar una mezcla equilibrada de estilos y composiciones, con la finalidad de crear ambientes únicos y de transmitir satisfacción y bienestar a sus moradores.
Aquí está una muestra de algunas decoración moderna y minimalistas de la sección inmobiliaria del Wall Street Journal. Esta casa está hecha de cristal y acero. Nos encanta la simplicy de que él, ¿no? 
